martes, 12 de junio de 2007

Consejos para comprar un contrabajo VII

Puesta a punto del contrabajo

En este capítulo y a sabiendas de que ha quedado pendiente realizar un monográfico sobre cuerdas. Voy a hacer hincapié en varios aspectos, relacionados con la puesta a punto del instrumento. Es muy recomendable tanto para aquellos que han optado por un instrumento de segunda mano y yo diría que casi obligatorio cuando el instrumento es nuevo.

Revisión de la curvatura del batidor:

Cuando realizamos una compra de segunda mano, es posible que el inicial comprador no realizó un ajuste previo cuando lo compró y/o lo ha tenido mucho tiempo utilizando, por ello ha sufrido un desgaste que a creado irregularidades en la curvatura del instrumento, fundamentalmente en el arquedado horizontal y en la leve curvatura que existe desde la cejilla hasta el final del batidor, es por ello que es necesario un ajuste. En el caso del contrabajo nuevo, normalmente el fabricante puede dejar impurezas, y no ajusta al límite el reglaje para que el comprador pueda posteriormente modifcar el 'tacto' a su modo de tocar.


Revisión y/o cambio de cuerdas:

En caso de un contrabajo de segunda mano, es bueno preguntar cual es el estado de las cuerdas dado a que un cambio de cuerdas tiene un coste de 150-300 aproximado, variará según el tipo de cuerdas que has escogido para el instrumento.

En el caso de contrabajo nuevo deciros que habitualmente, los fabricantes en serie generalmente optan por unas cuerdas bastante malas, con un sonido excesivamente metálico, el motivo seguramente será el de bajar el coste del producto.

Las cuerdas son un elemento fundamental para la sonoridad del instrumento, unas cuerdas malas o viejas normalmente producen un efecto de sordina, limitando así el volumen natural que puede alcanzar nuestro contrabajo.


Ajuste de alma:
Las dilataciones, los golpes, los cambios de cuerdas mal realizados pueden producir una caída del alma, el desplazamiento no es habitual pero es bueno realizar una revisión para conocer el estado y la posición de la misma. La colocación correcta suele ser un poco por debajo de la pata derecha del puente aunque centrada con respecto al mismo, y se puede desplazar más hacia al derecha y más abajo dependiendo de la sonoridad que deseamos dar al instrumento.

Es muy bueno informar a la persona que realiza el ajuste que tipo de sonido os gusta más de ese modo, el puede ajustar en una posición más adecuada el emplazamiento del alma.


Ajuste de puente:
Una vez se ha ajustado el Alma del instrumento, el ajuste del puente es más sencillo.
En el caso del contrabajo de segunda mano deciros que no os debéis fiar de las marcas de presión que se hayan producido, aunque en la mayoría de las ocasiones puede ayudar, el puente se debe colocar donde el instrumento y el sonido lo requiera, por eso es necesario el ajuste, pensad que el puente siempre tiene una tendencia a inclinarse hacia arriba, ello es debido a la presión que ejercen las cuerdas sobre el mismo, esto puede producir marcas que desorienten en el emplazamiento correcto de esta pieza transmisora del sonido.


La cejilla:
Como sabéis la cejilla es junto con el puente, una posible culpable del trasteo de vuestro instrumento, por ello cuando compréis un instrumento es bueno producir notas con energía para ver como responde esta parte.

En el caso de la compra de segunda mano es vital la comprobación dado a que el ajuste aquí puede ser más difícil.
En el caso de una compra de un instrumento este ajuste ayuda además del trasteo a nivelar las cuerdas con respecto al batidor.

Por suerte la cejilla es una pieza independiente al batidor y si da muchos problemas puede cambiarse.


La barra armónica: Como sabéis la barra, es una madera alagarda que se coloca en el lado izquierdo interior de la tapa frontal. Esta en el caso de los violines, cada 20-25 años aproximadamente se cambia o se encola de nuevo, en el caso de los contrabajos la duración suele ser mayor, pero no está demás que el luthier la revise, sobretodo si el instrumento se aproxima peligrosamente a los 80 años de edad.

Cura de cicatrices: Golpes, perforaciones, grietas, muchísimo cuidado si os encontráis ante este caso, solicitad la opinión de un luthier o constructor. Si el instrumento no muy viejo y es necesario abrirlo, cuidadin, la autopsia es para los muertos!

O nos estamos llevando una joya a la que le han reducido en el precio de la venta la reparación o nos estamos llevando un muerto y ese es su funeral.


Para finalizar este capítulo os dejo con otro conjunto de fotos:
Las fotos corresponden a la puesta a punto, en este caso se está realizando el batidor si os fijaís en la segunda foto veréis zonas más brillantes, son las zonas en las que se está puliendo para conseguir un mejor ajuste.

2 comentarios:

Watteria dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Watteria dijo...

Y todo para tener una funda enorme para el contrabando... Ese chavalote tocandose los bajos!!